¿Y si te dijeran que todo el Barrio de Malasaña está repleto de los más espectaculares conventos e iglesias del siglo XVII que guardan secretos de incalculable valor, te lo creerías?

En principio parece difícil de creer cuando éste es el barrio de los hipster, de l@s alternativ@s, de los pubs de la Movida, del lugar donde nadie es mal visto, uno de los sitios que más sufrió y que mayor simbología atesora de la Guerra de la Independencia.

Pero es cierto y así pudieron comprobarlo las 25 personas que nos acompañasteis por este espectacular recorrido, porque éste barrio contiene verdaderas joyas de arte sacro que en algunos casos es muy difícil llegar a ver porque están integrados dentro de conventos, si, conventos, que algunos quedan y donde todavía residen monjas.

Ainnsss, y es que sin querer poner los dientes largos a nadie, en esta ocasión hemos logrado acceder a su interior para descubrir cuadros de más de 400 años de antigüedad y de 7 metros de altura en perfecto estado, crucifijos que son verdades filigranas, pinturas de ilusionismo barroco, esculturas de Ricardo Bellver…

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Sinceramente creo que en esta ocasión hemos sido unos auténticos privilegiados al lograr ver lo que hemos visto, todo conseguido a través del esfuerzo y sobre todo de la ilusión.

Un barrio único en Madrid que aglutina historia, diversión, buen ambiente, joyas culturales, tendencias y libertad de expresión.

Un lugar imprescindible que representa a la perfección las señas de identidad de l@s madrileñ@s y de todo aquel que quiera disfrutarlo, porque aquí, vengas de donde vengas, serás bien recibido.