Cuando propones una Ruta por la Quinta de Vista Alegre en Carabanchel lo primero que se pregunta la gente es qué puede haber de interesante allí, alejado del centro de la ciudad en un barrio de la periferia…pero cuando lo descubren, la sorpresa es mayúscula.
Por ejemplo, una ermita única en Madrid, original del siglo XIII, repleta de reliquias y grabados históricos recién descubierto, toda una joya del románico-mudejar que se muestra a nuestro alcance y que en ocasiones se hace difícil valorar su importancia.
O también la historia de la cárcel de Carabanchel contada por uno de sus protagonistas, un funcionario que trabajó allí durante 14 años y que nos vino a regalar magníficas cosas surgidas de sus vivencias en el día a día de aquel correccional.
Y es que las 15 personas que nos acompañásteis quedastéis impactados por lo que allí se contó, por vivir momentos increíbles de la mano de una persona que ha sido funcionario de prisiones durante más de 40 años y que acumula situaciones y momentos que tardaría meses en contar.
Si unido a lo anterior añades a esta Ruta un viaje en el tiempo a través de la mayor Quinta de Recreo que ha existido en Madrid, el recorrido toma tintes de inolvidable.
La Quinta de Vista Alegre en su mejor momento, repleta de flores y plantas que hacen lucir con una belleza increíble un espacio recuperado para la ciudadanía que sin duda nos ha dado a todos un motivo para visitarlo y conocer un lugar único.
Y es que un espacio que acumula dos Palacios y atesora aún algunas de las edificaciones auxiliares, convierte a ésta Quinta en una de las más exclusivas y sorprendentes de las existentes en la ciudad.
Porque, quién nos iba a decir que después de tantos años cerrada, nos íbamos a encontrar con las joyas que pudimos contemplar y que son fiel reflejo de tiempos pasados, testigo de otro tiempo que nos permite preservar nuestra historia y conocer lo que otros hicieron.
Sin lugar a dudas un auténtico descubrimiento al alcance de todo aquel que quiera acercarse a visitarlo y que disfrutará de otra gran joya recuperada para suerte nuestra.